- ¡A la Montaña Con Ojos Protegidos! Consideraciones fundamentales para proteger los ojos de montañeros y senderistas ¿listos para la próxima aventura?
- En pleno verano, surgen planes que giran en torno a la naturaleza, paisajes, montañas, y disfrutar del aire libre. Entre la comida y el equipo que soléis llevar, le dais mucha importancia al calzado, la ropa, la mochila, pero…recuerdas la protección de tus ojos. ¡No te olvides de las gafas!
Madrid, 30/07/2025
Hoy queremos hablarles de un tema súper importante, especialmente ahora que estamos en pleno verano y el sol nos invita a explorar cada rincón de nuestras espectaculares montañas. ¿Listos para una aventura? ¡Claro que sí! Pero antes de que calcen sus botas y preparen sus mochilas, queremos recordarles algo fundamental: proteger sus ojos.
Sabemos que cuando pensamos en protección solar, lo primero que se nos viene a la mente es la piel, y eso está genial. Pero, ¿qué pasa con nuestros ojos? Son igual de vulnerables, o incluso más, a los daños de la radiación solar. Y no, esto no es solo un consejo para el verano. Las montañas son un imán durante todo el año, y en invierno, con la nieve, la protección ocular se vuelve aún más crítica.
El sol: ¿amigo o enemigo de tus ojos?
El sol, esa estrella que nos da vida y energía, emite diferentes tipos de radiación, y dos de ellas, los rayos UVA y UVB, pueden ser bastante perjudiciales para nuestros ojos.
- Los rayos UVA penetran profundamente, y aunque son conocidos por causar envejecimiento prematuro de la piel y arrugas, a largo plazo también pueden contribuir al cáncer de piel.
- Los rayos UVB son los culpables de las quemaduras solares y, en el corto plazo, pueden dañar la córnea, llevando a una ceguera temporal conocida como fotoqueratitis u oftalmia de las nieves (en terreno nevado).

Muchos oftalmólogos destacan que los ojos son especialmente vulnerables a factores como la radiación ultravioleta del sol. Es vital entender que, en la montaña, la exposición al sol es mucho más intensa. ¿Por qué? ¡Por la altitud! A mayor altura, la capa de atmósfera que nos protege de los rayos UV disminuye. Además, el terreno y las rocas pueden reflejar hasta un 20% de la luz solar, y lo más sorprendente: ¡la nieve refleja entre el 80% y el 90% de la luz solar! Es como un espejo gigante que intensifica la radiación, pudiendo ser el doble a 2000 metros y más del doble a 4000 metros (Blog FMM/ FMM, s.f.)
Problemas oculares: más allá de una simple molestia
La exposición sin protección a los rayos UV puede acarrear problemas serios y, a menudo, poco explorados. Además de las irritaciones y conjuntivitis, podemos enfrentarnos a:
- Fotoqueratitis o ceguera de la nieve: Una quemadura en la córnea que provoca dolor, visión borrosa, lagrimeo y sensibilidad a la luz (Óptica2000, s.f.).
- Retinopatía solar: Un daño más grave y duradero en la retina que, aunque indoloro, puede causar la destrucción de células sensibles a la luz y ser permanente (Óptica2000, s.f.).
- Cataratas: La exposición prolongada a los rayos UV contribuye a su aparición temprana, opacando el cristalino del ojo (Miranza, 2024).
- Pterigión: Un crecimiento anormal de tejido en la conjuntiva que, si avanza, puede afectar la visión y requerir cirugía (Miranza, 2024).
- Cáncer de piel en los párpados: Sí, ¡los párpados también pueden sufrir cáncer! Es un problema que a menudo se confunde con orzuelos o inflamaciones, pero la falta de protección solar en esta zona tan expuesta ha llevado a un aumento de tumores como el carcinoma basocelular y el melanoma (org, 2014).
¡Tus gafas de sol no son un accesorio más!
Ahora que sabemos lo que nos jugamos, hablemos de la solución: unas gafas de sol adecuadas. No se trata de cualquier par que encuentres por ahí. La clave es que bloqueen el 100% de los rayos UVA y UVB. Busca la etiqueta UV400 en las varillas laterales, que garantiza esta protección (FMM, s.f.).

Aquí tienes algunos consejos clave para elegir tus compañeras de aventura:
- Protección UV 400: Imprescindible para bloquear el 100% de los rayos UVA y UVB.
- Categoría de filtro:
- Para senderismo en cotas bajas o actividades con luz moderada, una categoría 2 o 3 podría ser suficiente.
- Para alta montaña, alpinismo o esquí, donde la luz es intensa y el reflejo de la nieve multiplica la radiación, necesitas gafas de categoría 3 o 4 (FMM, s.f.). ¡La categoría 4 es la más alta y la ideal para condiciones extremas!
- Protección lateral: Asegúrate de que tus gafas se ajusten bien a la cara y tengan protección lateral para evitar que la luz se cuele por los lados (FMM, s.f.).
- Renueva tus gafas: Los filtros solares no son eternos. Es recomendable renovar tus gafas de sol cada dos años para asegurar que sigan ofreciendo la protección adecuada (FMM, s.f.).
- Compra en sitios autorizados: Evita las imitaciones baratas que solo oscurecen la visión sin filtrar los rayos UV, lo que puede ser incluso peor que no usar nada (org, 2014). Invierte en tu salud visual y compra en ópticas.

Así que ya lo sabes, tanto si te lanzas a una ruta veraniega por la sierra, disfrutas de la escalada, o planeas una emocionante travesía de esquí de montaña en invierno, tus ojos merecen la mejor protección.
¡Disfruta de la montaña, del sol y de la naturaleza de forma segura! ¿Cuál será tu próxima aventura?
Referencias
- (s.f.). En la montaña, protégete del sol. Recuperado de https://fmm.es/en-la-montana-protegete-del-sol/
- (25 de julio de 2024). Cómo la luz Ultravioleta puede dañar tu visión y cómo protegerte. Recuperado de https://miranza.es/blog-de-oftalmologia/vision-rayos-uva/
- Daños de la radiación UV en los ojos. Recuperado de https://www.optica2000.com/salud-visual/afecciones-oculares/dano-uv-a-los-ojos
- org. (8 de enero de 2014). Ojos también sufren lesiones con el sol y desarrollan cáncer. Recuperado de https://ecancer.org/es/news/5044-ojos-tambien-sufren-lesiones-con-el-sol-y-desarrollan-cancer