El Programa de Tecnificación de Alpinismo de la FMM se entrena en los Alpes.

 Ahora que ha pasado un tiempo desde que el grupo viajó a Ecrins y hemos podido asimilar las emociones y conceptos que allí vivimos; echemos un vistazo atrás para recordar con la miel en los labios la fantástica semana que, con la ilusión de un niño pequeño y como equipo, disfrutamos.

Era un intercentros inter territorial en la zona de Ecrins, más concretamente entre el Valle de Fournel y Ceillac, dos sitios del macizo francés de escalada en hielo por excelencia.
Acudimos en compañía de otros equipos como los Navarros, los Valencianos, los Andaluces y nuestros queridos Gallegos.

Lunes 7 de febrero, nos espera un largo viaje en Furgoneta hasta el Pueblo de L’Argentière-la-Bessée, donde nos esperaban con una sonrisa y una buena cena (cosa que así seguiría los próximos cinco días) en Le Moulin Papillon, una agradable y bien situada para la ocasión Guite típica de los Alpes.
Llegamos cansados del viaje y con hambre, nos encontramos ya allí con Pablo Herráez, técnico y gurú que nos acompañará los próximos días a parte de Pablo y Marco.
Cena contundente, breafing con el plan del martes y a dormir.

Martes 8, primer día de actividad, toma de contacto con el hielo, con los crampones y con los piolets. Puesta a punto mental para lo que nos espera.
Para hacernos al entorno y aprender y repasar las técnicas básicas de la escalada en hielo nos acercamos al hielódromo que hay cerca de la zona de Ceillac (https://goo.gl/maps/dS47f9FFukVE22QKA), zona idónea para que Herráez nos diese una MasterClass de hielo en la que no nos quedó más remedio que aprender, ¡aprender mucho!

Miércoles 9 de febrero, primer día de cascadas, nervios e ilusión, como cuando te invitan a jugar al patio de los mayores. Hay que darlo todo para que te vuelvan a invitar y eso hicimos, acompañados por una buena meteo madrugamos y pusimos rumbo a Ceillac, cascadas largas y de un grado asequible para coger confianza y sumar metros.
Por cordadas de a dos y los técnicos acompañándonos hicimos lo que fue para muchos de nosotros los primeros largos en hielo de forma autónoma. Un día para recordar que sirvió de motivación para los siguientes.

Actividades y cordadas del día:
Víctor y Kiko: Formas du chaos
Mateo y Alfon: Formas du chaos
Mario y Paula: la Y y Easy rider.
Marina y Miki: Formas du chaos y la Easy Rider.
Para terminar el día; Alfonso, Víctor, Mario y ambos Pablos, se acercaron a la Sombra de Heros.

Jueves 10 de febrero, ninguna vía se llamaba así pero podemos decir que fue el día de «Elevar los Sentimientos».
Casi sin darnos ni cuenta ha pasado media semana, lo que significa que el último día está más cerca… ¡Lo que significa también que hay que aprovechar los días al máximo!
Segundo día de cascadas, hoy nos toca decidir a nosotros la actividad, vamos al Valle de Fournel y aunque por lo que dicen los locales hay menos hielo que otros años, las posibilidades son muchas. Elegimos compañero y actividad en función de las ganas y las sensaciones del día anterior. El terreno está «fácil» ya que encontramos la mayoría de cascadas muy repetidas y por lo tanto bastante picadas, lo que favorece la progresión y lo que nos permite forzar un poco más la máquina a la hora de escoger.

Fue un bonito día de compartir, y repitiendo las palabras de alguno de los compañeros al llegar de vuelta a la Furgo: «¡Wow! Ha sido la actividad más guapa que he hecho en mi vida…» a lo que otros cuantos se sumaban y afirmaban… Y claro, si al volver de la actividad dices eso, al día siguiente sólo puedes querer más.

Actividades y cordadas del día:
Víctor y Miki: Delicados.
Marina y Paula: Liberez des Lutins.
Mateo y Alfon: Monde des glaces.
Kiko y Mario: Delicados.

Viernes 11 de febrero, ¡Queremos más!
El día de ayer nos enseñó muchas cosas, que la escalada en hielo es una pasada y que compartir actividades serias forja amistades. También que escalar debajo de otra cordada no mola a no ser que seas inmune a los «cachitos» y «cachazos» de hielo que el de arriba va dejando caer sobre ti como si un imán tuvieses.
Así que con estas lecciones sacamos la conclusión de que había que madrugar más y estar los primeros a pie de cascada.
Cuando suena el despertador no hace mucha gracia, pero cuando te acuerdas que estás en Alpes y vas a escalar de nuevo en hielo la gracia vuelve a ti y bajas a desayunar con una sonrisa de oreja a oreja.
La dinámica y las condiciones de terreno son las mismas que ayer, nosotros elegimos en función de las sensaciones y el cansancio acumulado. Hoy de nuevo al Valle de Fournel.

Actividades y cordadas del día:
Viti y alfon: Beating the retreat.
Miki y marina: Beating the retreat.
Paula y Mario: Beating the retreat.
Mateo y Kiko: Capitaine Courageux.

Sábado 12 de febrero, último de día de escalada, se juntan las ganas con el cansancio. Los gemelos piden tregua y el coco pide hielo.
Ayer por el día hizo más calor que los días atrás y por contra por la noche hizo más frío de los días atrás, esto hizo cambiar el hielo, estaba estalladizo y duro, las condiciones que encontramos días anteriores ya no están y hay que tratar al hielo con más cariño… Sin problema, somos un grupete bien majo y cariñoso…
Para acabar volvimos al Valle de Fournel y nos guiamos por las vías que habían hecho los compañeros en días atrás para elegir y terminar con un buen sabor de boca.

Actividades y cordadas del día:
Viti y Mario: Capitaine Courageux.
Marina y Kiko: A la recherche du temps perdu.
Mateo y Paula: Delicados.
Miki y Alfon: A la recherche du temps perdu.

Domingo 13 de febrero, viaje de vuelta.
Hoy toca madrugar y esta vez no es para escalar, asi que sí, os lo podéis imaginar, cuando suena el despertador no hace ninguna gracia…
Desayuno, nos despedimos de los encantadores anfitriones que nos hospedaron y viaje largo de vuelta a Madrid… Tenemos muchas cosas que asimilar de esta semana, quizás la que más hemos disfrutado de todas.